Precisamente llevaba yo un tiempo dándole vueltas al asunto. Desde chiquitito me enseñaron a tratar de usted a los desconocidos, y así lo hago desde que lo recuerdo. Antes sólo lo usaba con personas de mayor edad que yo, pero desde que crucé la treintena también con gente más joven. El que no usen el mismo tratamiento conmigo no suele molestarme, siempre que las formas sean correctas. Es más, en cuanto la conversación pasa del cruce de varias frases, en seguida suelo ofrecer el tuteo a mi interlocutor. Pero de principio, usted para arriba, usted para abajo.
Lo que me ha hecho pensar en este tema es que últimamente me he dado cuenta que hay gente que no sólo te tutea de principio, sino que se siente molesta que lo trates de usted. Me pregunto cuáles serán sus motivos. Quizás sientan que el tuteo les rejuvenezca, o quizás estén acostumbrados a que los únicos que les traten de usted sean los agentes de la autoridad a la hora de ponerles una multa.
Creo que se equivocan. Pienso que es riqueza para el lenguaje. Pobres anglosajones que sólo tienen el “you”. Así les va a los traductores, que a veces no tiene claro cuándo los personajes deben empezar a tutearse.
Voy más allá. Si por mí fuera reintroducía el voseo como término intermedio. Digamos:
“- Hola, ¿qué desea usted?
- Saber a la hora que salís vos de trabajar, para invitaros a una copa.
- Recógeme a las cuatro, chato.”
Me podrán tildar de reaccionario, retrógrado o lo que les de la gana, pero seguiré usando el usted de primeras. Para mí significa respeto, y da la oportunidad a hacer patente el progresivo acercamiento de los interlocutores.
No sé, ¿qué pensáis vos?