viernes, 23 de julio de 2021

Confesiones caleteras


- Qué mala me encuentro hoy, Juan.
- Ojú, qué jartura, Antonia. En cuanto me seque me voy al wichi con los amigotes a tomarme unos vasos.
- Juan, no quiero morirme sin confesarte algo.
- Esta mujer me va a dar el día. Amo a vé...
- Juanito no es hijo tuyo.
- Bueno, lo he criao yo, ¿no? Pues es mío.
- ¿No te ha cogío de sorpresa?
- Claro que no, Antonia, si no puede ser más distinto a mí. Venga, cuéntalo todo. ¿Y de quién es?
- De Paco, el que se mató en el astillero.
- Pues mira, dentro de lo malo, me alegro. Paco tenía muy buena salud. Así ha salido Juanito, que es fuerte como un toro.
- Mira que eres raro, Juan. ¿Y ahora de qué te ríes?
- Estoy pensando. Con lo guapo que era Paco, ¿cómo conseguiste liarte con él? Porque mira que eres fea, Antonia, ja, ja, ja.
- Hijolagranputa, un día de estos te echo salfumán en el puchero.
- No hay cojone, ja, ja, ja.

2 comentarios: