Este fue el boceto que presenté durante el plazo de solicitudes. El nombre que le puse: "¡Pañueliiiiito número uno!".
El pasado domingo 31 de mayo tuvo lugar el Certamen. Este año fue a la sombrita, junto a la nueva estación de trenes. Tras ocho horas de trabajo, este fue el resultado.
La verdad es que quedé muy satisfecho, porque creo que conseguí reproducir con bastante fidelidad el boceto en el contenedor. Eso sí, fuimos solo siete participantes, se otorgaban tres premios, y aún así no me llevé ninguno. Supuso una decepción, la verdad, porque aunque había algún que otro auténtico profesional, pensé que tenía posibilidades, al menos con un 2º o un 3º.
Así que el único premio que obtuve, aparte de echar un día entretenido (y unas agujetas de tres días por el esfuerzo) es tener otra obra en la calle, para disfrute de mis conciudadanos. ¿Repetiré el año que viene? La verdad, no lo sé.
Me gusta el graffiti y me gusta el mensaje ¡Enhorabuena!
ResponderEliminar¡Gracias! ¡Alguien que sabe apreciar el auténtico aaaaaaarte, ja, ja, ja!
ResponderEliminarÁnimo, debe ser verdad eso de que casi nadie logra ser profeta en su tierra.
ResponderEliminarA ver si a la tercera va la vencida.
¡¡Y si no préndele fuego al ayuntamiento¡¡ (o algo).
Muchas gracias, John. Un honor recibir tu visita.
ResponderEliminarAhora que la releo, me quedó una entrada bastante quejica. Qué malos los del jurado que no me han dado premio, buah, buah. Pero no me arrepiento. Si de algo sirve un blog de temática personal es para dejar constancia del estado de ánimo del que lo mantiene. ¡Y el mío era de berrinche! ¡Tiembla, ayuntamiento, tiembla! :)
Curioso. Varios amigos me han avisado que una foto de mi contenedor se ha vuelto "viral" en Facebook estos días. También lo he visto en Twitter.
ResponderEliminarMi primera "obra" con repercusión nacional. ¡Veis como tenía justificación mi berrinche, ja, ja, ja!