Seguimos para bingo en bricolaje casero de bajo coste. Bajo de cero, vamos. En este caso, he aprovechado unos recortes de friso que me dio un amigo, y unos trozos de listón que nos sobró del montaje para Barrunto. Las ruedas las tenía yo por ahí, de un mueble al que no se las pusimos en su día.
El cajón resultante, también simple a más no poder, servirá para guardar los cojines mientras dormimos.
He perfeccionado la técnica del corte con sierra circular. Ya no tengo problemas en hacer cortes rectos, con la ayuda de un listón guía amarrado a la tabla a cortar mediante un par de sargentos.
Estoy a la espera de retos de mayor calado, porque esto de los cajones de almacenaje está ya más que dominado.
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