jueves, 28 de abril de 2011

Pajarillo, segunda parte

Recordaréis este dibujo, que os mostré hace unos días. En realidad no es el mismo. Se trata de una copia hecha con los rotuladores Copic Ciao, de los que finalmente me he hecho con una cajita de 36.
La razón de repetir el motivo es doble. Por un lado, poder comparar el resultado usando estos rotuladores frente a los Carioca de toda la vida. El segundo, hacer una versión mejorada para regalarsela a mi hermana, que me dijo que le había gustado el dibujillo.
La foto no ha salido muy bien, pero si comparáis con el anterior, se puede ver que cuando he querido uniformidad, la he conseguido. El color es algo más apagado, porque aunque 36 colores parecen muchos, dividiendo entre colores básicos y secundarios, al final tienes un par de tonos o tres como mucho de cada uno, y con lo que uno tiene se ha de conformar. Algo se puede jugar mezclando colores, pero no mucho.
Como os decía en la anterior entrada, colorear con estos rotuladores es un gustazo. Lo malo, como dice illeR, es que son caros y me temo que con estos 36 no me voy a conformar...

jueves, 21 de abril de 2011

Vitral


Como se ve sigo enfrascado con los rotuladores. Hace un par de semanas me acerqué a Rimada, una tienda de Cádiz donde venden Copics, y me hice con tres para probarlos: un negro y dos tonos de grises.  Son una gozada. Precisamente lo bien que cubre el negro me dio la idea de hacer esta vidriera, en la que la negrura de las junturas contrasta con el colorido de las piezas de vidrio.
La semana que viene se celebra el XII Salón Manga de Jerez de la Frontera. Quizás aproveche para darme una vuelta y aprender algo sobre rotuladores de los que más los usan.

martes, 12 de abril de 2011

Malatestator: solución de baja tecnología para tirar cómodamente la basura

Amigo bloguero, ¿cansado de que se te claven las asas de las bolsas de basura? Ha llegado la solución definitiva: el Malatestator (patent pending).

¡Dior, cuánto dolor!
Años de investigación han conducido al que suscribe a la creación de un elemento que se hará indispensable en todo hogar. No más manos cortadas, no más dolor innecesario, y todo gracias a una solución de (baja) tecnología, al alcance de todos.
El Malatestator es en esencia un cilindro metálico hueco. Su forma ergonómica se adapta a la mano de manera natural. Al ser hueco no incrementa el peso que soporta el usuario. Las asas descansan sobre el Malatestator, no sobre nuestra mano, que sujeta cómodamente el invento. Todo son ventajas y ningún inconveniente.

¡Gracias, Malatestator!
¿Cómo conseguir un Malatestator? Puede esperar a que esté a la venta en su chino habitual, o bien puede hacérselo usted mismo aserrando un trozo del palo de una escoba. 

No lo olvide. Disfrute desde ya de su Malatestator.

sábado, 2 de abril de 2011

Rivas Creek

Lejos de ti,
bajo la lluvia te recordaré.
Pero sé,
que volverán los buenos tiempos,
otra vez.


Eso decía la letra de una de las canciones del disco "Si el whisky no te arruina, las mujeres lo harán", que el grupo de rock "La Frontera" publicó en 1986. Mucho ha llovido desde entonces, y sin duda esa intención de que vuelvan los buenos tiempos es la que ha impulsado a Javier Andreu, Tony Marmota y compañía a sacar un nuevo disco con sabor añejo.

"Rivas Creek", que así se titula, es una vuelta a los orígenes de la banda. Al más puro estilo fronterizo que les hizo únicos allá por los 80. Algunos pensarán que qué sentido tiene hacer más de lo mismo, pero sus fans de entonces, entre los que me encuentro, lo agradecemos.

La semana pasada estuvimos en el concierto que dieron en Cádiz, en la sala Supersonic. Sé que no soy objetivo, pero creo que la sensación general es que habíamos asistido a un pedazo de concierto. Además de algunas de las nuevas canciones, como Rivas Creek, El tren se va, Los gatos se suicidan a las seis, El Coronel o Yonqui de ti, no dejaron de tocar sus clásicos, especialmente del primer disco. Javier sigue teniendo ese vozarrón, los músicos que se han agregado son auténticos profesionales, y el resultado fue que el que suscribe no paró de cantar y bailar a pesar de iba con tortícolis.

Uno de los momentos cumbres fue cuando tocaron "Tren de Medianoche", del que os dejo un trozo. Dejé de grabar para poder disfrutar de la canción, y eso hizo que no quedara registrado el pedazo de final modificado que nos regalaron. Perdonad el infame sonido, pero es lo que tiene usar la cámara del móvil.



Al final del concierto compré el disco y me hice una foto con Javier. He tenido toda la semana para escucharlo y puedo decir que es todo lo que un antiguo fan podía esperar.

Os dejo con el único vídeo que han grabado hasta ahora, "El tren se va", cuya escenografía recuerda de manera clara las fotos que acompañaban al LP "Tren de Medianoche". Mucha suerte y ojalá vuelvan a tomar el tren del éxito.