lunes, 31 de julio de 2006

Con el culo al aire

- Niño, no saltes el estero, que te vas a caer y te vas a poner pipando.

- Que no papá, que no me caigo. Si estoy hecho un campeón. ¡Mira!

(Choffff!)

Naturalmente, me caí. Y me puse pipando, en ese agua bastante sucia de salinas donde estábamos cogiendo camarones. Lo gracioso del asunto fue que tuve que volver en bolas (literalmente) a casa, para evitar el resfriado. Por aquel entonces ya empezaba a sentir vergüenza de mi desnudez, así que figuraos el plan: cruzar el pueblo montado detrás de mi padre en su Mobylette, y mal cubierto sólo por su camisa. Menos mal que no me crucé con ninguna niña de la escuela…

Pues ayer por poco no se repite la historia. Como no tenía nada mejor que hacer, me acerqué en bicicleta a darme un bañito en la puntilla del muelle, más a gusto que un gorrión en un charco. A esto que se acerca a mi banda una familia: padre, madre y niño chico. Y a mí, que me da por lanzarme briosamente de cabeza, para mostrarles mis aptitudes acuáticas.

Se conoce que el bañador carecía de cordón, y que el elástico estaba más flojo que un muelle de guita, porque al entrar en el agua noté cómo se deslizaba graciosamente hasta mis tobillos. Total, que la familia tuvo que ver en mí a otro Eduardo Noriega. Bueno miento, porque al parecer el culo que aparece en el anuncio es de un doble. ¿De qué trabajas? Yo, de doble de culos. Lo flipas, colega.

Y gracias, porque si no llego a sujetar la prenda con los deditos de los pies en el último momento, hubiera tenido que volver a casa como aquella vez, sólo que en bici y, lo que es peor, con bastantes añitos más.


viernes, 28 de julio de 2006

La carpeta de los recuerdos: La libreta de la mili

Para algunos el extinto servicio militar obligatorio servía para convertir a los niños en hombres. Para la mayoría, no servía para nada. A mí, que fui de los últimos que lo sufrió en sus carnes, me sirvió para tres cosas:
a) Comprender que aunque me guste la historia y el cine bélicos, no me gusta la vida militar.
b) Sacarme una foto vestido con uniforme de camuflaje, fusil armado con bayoneta y cara de pocos amigos, en la que me veo hasta guapo.
c) Tener tema de conversación con el resto de desafortunados que pasaron por esa experiencia.
Esto último es especialmente relevante. A pesar de ocupar un período pequeño de nuestras vidas, la mili da mucho material para el anecdotario particular. Pasa como con las series antiguas, una vez sacado el tema, hay cuerda para rato.
No os voy a aburrir con la historia de mi puta mili, que además fue exprés: sólo estuve tres meses, ya que un enchufe me consiguió la blanca aunque un poco tarde. Pero sí que contaré una pequeña anécdota, que sucedió el día de mi incorporación.
En realidad era ya noche, porque los recién llegados pasamos la tarde en un cuartel de la legión, donde un teniente majareta trataba de conseguir voluntarios. Una vez en mi cuartel, estando formados en el patio de armas (por cierto, dedicado al Generalísimo, con una pintura en azulejos enorme dominándolo), el sargento nos dio la charla de rigor. Que si bienvenidos al ejército, que si a partir de ahora no somos ciudadanos normales, sino soldados, etc, etc. Muy educado, muy correcto. Al final, el buen hombre preguntó: ¿habéis entendido?. Todos callamos, menos un pirado que gritó: “¡SEÑOR, SÍ SEÑOR!”. Descojone general, incluido el sargento: “Te has confundido de ejército, chaval, aquí se responde con un sí mi sargento. Cuánto mal hace el cine...”





jueves, 27 de julio de 2006

La carpeta de los recuerdos

Buscando en el baúl de los recuerdos, uh-uh-uh, cantaba Karina. No tengo baúl, pero como casi todo quisque, supongo, tengo una carpeta.
Mi carpeta de los recuerdos es negra, de plástico, abultada. Parece que esté a punto de estallar, rebosando de papeluchos sin valor material pero gran valor sentimental. Entradas de conciertos, cines y espectáculos varios, recortes de periódico y hojas sueltas son su contenido. Sólo la veo de vez en cuando, pero una vez la abro, reviso hasta el último trozo de servilleta con un monigote, hasta el último folleto.
Hojearla es repasar buena parte de mi vida. ¿Queréis echarle un vistazo?

martes, 25 de julio de 2006

Cambio de perspectiva

Que si sí, que si no, que si blanco, que si negro, que si rubio, que si tostá. Lo que está claro es que las vistas son mucho mejores.

Suena de fondo: No me gusta trabajar. Los Rebeldes

Suena de fondo: Todo cambiará mañana. La Frontera

viernes, 21 de julio de 2006

miércoles, 19 de julio de 2006

La pluma negra

Posiblemente aquel hombre había visto “Muerte entre las flores”.
O no, porque en realidad casi todos mis “clientes” suplican por su vida. Los que tienen tiempo para darse cuenta de lo que se les viene encima, claro. Pero es que éste lo hacía de un modo exagerado. Impúdico casi. Espero tener más aplomo cuando me toque el turno.
Le dejé que terminara la frase (ante todo hay que tener educación) y lo finiquité de la forma más limpia que me fue posible: con una cuerda de piano. De haber usado la pistola con silenciador hubiera sido más rápido, pero se hubiera podido manchar aquel tapiz tan bonito. Ese cielo azul y los olivos al fondo me recordaban a mi Sicilia natal.
Bajé la vista al reciente cadáver. ¿Por qué había tenido que terminar así? ¿Cuál había sido su pecado? Tuve que forzar un poco la memoria, ya que concedo poca importancia a los detalles accesorios. En realidad, sí que había pecado. Contra el décimo mandamiento concretamente: No desearás a la mujer del prójimo ¿o era los bienes ajenos? Lo mismo daba. Yo no lo culpaba, desde luego, ya que la mujer de este prójimo en concreto era ciertamente deseable. La imagen de la chica, junto al muerto en la fotografía que me llegó con el pedido, sí que vino rápidamente a mi memoria. Pero de ahí a sentir lástima iba un trecho. El fulano sabía dónde se metía. En todos los sentidos, desde luego... Si no fuera un fiambre le envidiaría y todo. ¿Cómo decía aquella canción del Sabina? La de los cuernos, sí hombre... Realmente, yo sólo fui la mano ejecutora del destino que él mismo se había sellado. De todas formas, si me quedaba algún resquicio de conciencia, los estipendios recibidos lo habían terminado de borrar. ¿Quién dice que una vida no tiene precio? La de éste al menos, sí: 60.000, sin IVA, claro.
Revisé concienzudamente la habitación en busca de posibles restos que sirvieran para echarme el guante. Sonreí para mis adentros recordando el último episodio de CSI Las Vegas. La escena se parecía bastante a la de uno de los asesinatos de esa semana. Con sus defectos, esta serie es casi un cursillo a distancia para asesinos. Que yo supiera, en la sección de policía científica no disponen ni de la mitad de los aparatos que aparecen en la serie, ni son tan rápidos en los análisis. Pero tampoco son tontos, así que es mejor pecar de precavido.
Una vez quedé satisfecho, saqué una pequeña pluma negra del bolsillo y se la puse en la boca al muerto. Quiero pensar que no lo hago por vanidad, aunque quizás me engañe, sino por joder a un tal Batiste o Caratriste, un capitán de la policía con el que tengo ciertas cuentas pendientes. Me encanta imaginarlo bufando de rabia al comprobar que sigo vivo y que me van bien los negocios.

lunes, 17 de julio de 2006

Música de anuncios (III)


Powered by Castpost

Ya sabéis, es necesario acertar anunciante, intérprete y título de la canción. No me diréis que la piruleta de esta semana no está fácil de conseguir. Pero la tenía que colgar, es tan potita...

Ahora bien, esta otra ya es diferente. Como alguien la adivine, se lleva un chupachups Kojak de los gordos.


Powered by Castpost

Probablemente la canción más buscada durante la última semana. No entra a concurso porque aunque todos sabréis de inmediato a qué anuncio pertenece, no creo que nadie adivine la intérprete. Yo al menos no he logrado encontrarla. Lo que se rumorea por la web es que se trata de una versión de la canción Toxic Girl, de la banda Kings of Convenience. Se parece, pero no sé yo.
Perdonad que plantee un enigma sin tener la solución. La cuelgo porque está chula (qué bien suena un buen punteo de guitarra) y por agradecer a mi cuñaaaaao y a Artemisa el que me la hayan mandado.

Que las disfruten vuestras mercedes.

sábado, 15 de julio de 2006

Hiperrealismo

Preguntaba Tictac en el anterior artículo si me interesa la pintura hiperrealista. La respuesta, o más bien, las respuestas, merecen un artículo aparte.
Una introducción al tema. Por hiperrealismo se conoce una tendencia artística originada en la segunda mitad del siglo XX, como reacción al cubismo, expresionismo, y el resto de movimientos que habían ido sustituyendo paulatinamente la naturaleza por representaciones cada vez más alejadas de la realidad. Ya se sabe la historia del arte se compone de movimientos pendulares, así que éste era de esperar. El hiperrealista trata de reproducir lo que ve, como si de una cámara fotográfica se tratara.

Gran Vía. Antonio López

Como aficionado al arte, el hiperrealismo no es mi estilo favorito. Ya que en cierto modo se trata de una vuelta a los clásicos, para eso ya están los clásicos. Especialmente el barroco, con Velázquez y Goya como mis pintores preferidos. Tan diferentes y tan geniales uno como el otro.
Ahora bien, si comparo el hiperrealismo con el resto de tendencias actuales, prefiero el primero. Dice mi amigo D. que una vez que se inventó la fotografía, la pintura realista está de más. Personalmente yo digo que un cuerno. Hay cosas que no se captan en una fotografía, y aunque hoy en día existe el retoque digital, siempre me gustará más una obra bien pintada que una foto. Aunque sea por el mero hecho de ser consciente de que alguien se ha pasado unas cuantas horas creando el cuadro pincelada a pincelada, no simplemente pulsando un botón. Por favor, los aficionados a la fotografía no se me ofendan, ya saben a lo que me refiero.
Por ello, ante una pintura hiperrealista no puedo dejar de sentir admiración. Admiración por la técnica, por la forma, aunque el contenido sea insulso. Entiendo que hay cosas que no sé apreciar, y por eso no puedo decir que la pintura abstracta sea un fraude. Me gusta más una cerveza que un buen vino de Rioja, así que con esto me puede pasar lo mismo. Cada cual tiene sus gustos, pero entre un cuadro de Antonio López, y uno de Miró, me quedo con el primero.

Estampa. Joan Miro.

Como aficionado a pintar, la respuesta es parecida, pero no igual. Considero que soy un aprendiz, y que nunca dejaré de serlo. No en el sentido de que siempre tendré cosas que aprender. Eso le pasa a todo el mundo. Sino en el de que nunca pasaré de aficionado y ni siquiera de los buenos. No es falsa modestia, ni quiero que nadie me contradiga (Paco, tampoco te cebes) es que hay muchísima gente que pinta estupendamente. Eso no quita para que la pintura me dé satisfacciones, tanto al pintar como al ver mis cuadros terminados. Me hincho como un globo de orgullo cuando veo que un cuadro me ha quedado bien.
Pero me estoy desviando. No me considero un artista, sino más bien un aspirante a buen artesano. Para mí lo primero es aprender a reproducir la realidad lo más fielmente posible. Si hay algo de creación artística en mis cuadros, estará más en la elección del tema y la composición que en la ejecución en sí. Eso es lo que he estado haciendo hasta ahora y es lo que seguiré haciendo hasta que coja confianza. El que Tictac sugiera que el hiperrealismo quizás se me daría bien, aunque en parte sea un halago, también me recuerda que aún estoy lejos de tener una técnica depurada.
Pero eso no es malo, porque me anima a pintar otro cuadro mejor. Lo mismo que un artículo malo (como éste, pero Paco, no te cebes) me anima a escribir otro mejor. Pero eso será otro día.

miércoles, 12 de julio de 2006

Bodegón 2

.

Título: Bodegón 2
Autor: Joe McNamara
Fecha de ejecución: Julio’06
Técnica: Óleo sobre lienzo
Tamaño: 41x33 (6F)
Tema: Dos rosas en un jarrón de cristal sobre un fondo de mueble de madera.
Comentario del autor: “Lo he titulado Bodegón 2 porque es casi una continuación de mi anterior cuadro, en el que como recordaréis me quedó pendiente pintar algún objeto de cristal. En realidad lo inicié por eso y por aprovechar un lienzo que dejó a medio pintar mi mujer. Si se observa de cerca aún se ven los relieves de pinceladas anteriores que no me he molestado en rascar. Cogí el lienzo un día raro de esos que tengo ganas, y en una hora tenía hecho un cuadrito bastante mono ‘alla prima’ pero que no gustó a la crítica (la crítica es mi mujer, naturalmente). Así que me puse manos a la obra, al principio sin mucho ánimo, y no fue hasta dos o tres semanas más tarde que he podido darlo por terminado con un estilo más ‘realista’. Ya tengo ganas de empezar el siguiente, que por variar un poco, será un cuadro de exteriores.”

martes, 11 de julio de 2006

Buenas noches, otra vez

"Empezaré por no presentarme. Sería inútil, porque si alguien alguna vez lee algo de esto, será porque le he dado la dirección, ergo me conoce. Lo que sí explicaré es el porqué del nick. Para el que no sea fan de Pérez-Reverte diré que Gualterio Malatesta es el malo malísimo de las aventuras del Capitán Alatriste. El tipo me cayó simpático desde el primer tomo. Lo que más me gusta de él es que no oculta lo que es, y carece por completo de dobleces. Me gusta pensar que soy como él en ese sentido, aunque puede ser que me engañe a mi mismo en ésto tanto como en otras cosas.En cuanto al porqué de publicar una página personal, se me ocurren varias excusas válidas. Aburrimiento, compartir pensamientos y experiencias..., pero me temo, como le dije a mi amigo Totito, que no es más que algún tipo de exhibicionismo. Que lo disfruten vuestras mercedes."

Desde que escribí estás líneas ha pasado, quién lo diría, un año. Un período que los humanos tomamos como referencia para muchas cosas, entre ellas, publicar un artículo conmemorativo. Éste casi se me pasa, pero in extremis me he acordado de tan ilustre efeméride.
El balance no puede ser sino positivo. De no ser así no seguiría publicando. Aparte de servir de válvula de escape, esta página me ha servido para conocer a mucha buena gente. También a algún troll, pero de esos no quiero ni acordarme.
A todos quiero dar las gracias por perder parte de su tiempo en leer mis escritos. A los que conocía de antes, como Izco, Moi, Fernandi, Manolo, Eva, Javi... A los que he conocido ahora, Carlos, Ana, Bea, Unai, Delia... A los que me queda por conocer, Ismael, Helena, Alberto, Andrea... Al resto que me visita de vez en cuando y que no cito porque no sé vuestros nombres. A mi mujer, a mis padres, mi hermana y cuñado, que me visitan continuamente aunque casi nunca comentan.
Gracias de nuevo a todos. Seguid ahí. Un abrazo.

Jose Mari

(Suspiro)

Citando la canción de Friends, no está siendo un buen día, ni semana, ni mes, ni incluso año. Y encima voy y me entero de que Espinete y Chema hacían cositas cuando no los veíamos. Aunque ahora que pienso, era bastante evidente. Un niño que vivía sólo, que iba desnudo por ahí y que entraba en la panadería continuamente a pedir bollos era demasiado sospechoso. Todo se derrumba a mi alrededor.
No es broma, lo leí en el teleprograma de la semana pasada. Chelo Vivares (Espinete) y Juan Ramón Pardo (Chema) eran marido y mujer. Qué cosas.

domingo, 9 de julio de 2006

Relatos que me excitaron

Siguiendo prescripciones facultativas, voy a inaugurar una sección de contenido erótico-festivo. Alfred Hitchcott recopiló en un volumen una serie de “Relatos que me asustaron”. Emulando al genio del suspense, podría titutar esta sección “Relatos que me excitaron”.
El primero de la serie pertenece a una de mis novelas de espías preferidas: “La Isla de las Tormentas”, de Ken Follet. Fue la primera novela de éxito de este escritor, autor también de “Los pilares de la tierra”. Quizás alguno haya visto la película, protagonizada magistralmente por Donal Shuterland, y titulada “El ojo de la aguja”. Abro paréntesis. Este tío me encanta, ¿os acordáis del maravilloso tanquista loco que interpretó en “Los violentos de Kelly”? Antológico.
El protagonista es un espía alemán que recala casualmente en una pequeña isla de la costa inglesa. Allí viven una pila de ovejas y cuatro personas: el pastor y una pareja con su bebé. El marido, que iba para piloto de cazas, se ha quedó inválido el día de la boda en un accidente de carretera. Desde entonces no toca a su mujer, y de eso hace ya varios años. La llegada del apuesto espía es una tentación demasiado fuerte, así que lo que sigue a continuación se convierte en algo inevitable.

Fragmento de "La isla de las tormentas"

Nota: Si alguien que tenga interés tiene problemas para ver el archivo, que me lo diga y se lo envío por email.

viernes, 7 de julio de 2006

Música de anuncios (II)


Powered by Castpost

Después de que Paco el Flaco adivinara la anterior canción en 0,2 nanosegundos, podría haber dado el juego por terminado. Pero no, soy un asesino despiadado que no se arredra ante nada ni ante nadie.
Por ello os ofrezco una nueva adivinanza, esta vez un poquito más difícil. Esta vez, además del anunciante, pido el título y autor de la canción. Para hacerlo un poquito más complicado, no he colgado la versión que aparecía en el anuncio, sino la original.
Paco, si la sabes, por favor, espérate un ratito, pisha.

Música de anuncios


Powered by Castpost

Sabido es que los publicistas tienen buen oído. Sólo hay que estar un poco atentos a la música de algunos anuncios para comprobarlo. Es posible que sea el resultado de machacarnos con las mismas melodías una y otra vez, pero lo cierto es que las canciones de gran parte de los spots molan.
En internet hay muchos foros en los que la gente intercambia información sobre la música de tal y cual anuncio. Aquí os proponongo algo parecido, pero a la inversa.
Le doy una piruleta (virtual) al primero que acierte con el anunciante que usó la bella melodía que a estas alturas muchos ya estaréis escuchando. Esta, por ser la primera, es de las fáciles.
Si os gusta el jueguecito, tengo algunas otras canciones en la recámara.

miércoles, 5 de julio de 2006

Fuera de contexto

"Con las manos ocupadas no puedo matar."

Escuchado hoy a una compañera de trabajo.

lunes, 3 de julio de 2006

Ahora más que nunca

Así reza el lema que ha escogido este año el Cádiz S.A.D. para la campaña de captación de socios. Un lema apropiado si tenemos en cuenta que el equipo ha descendido a 2ª división después de una única temporada en Primera.
Es de prever que el número de socios descienda, ya que fueron muchos los que se abonaron al Carranza para ver equipos de la que dicen es la mejor liga del mundo. No seré yo quien los critique, ya que nunca he sido socio, y aunque me lo esté planteando, es poco probable que me abone esta temporada. Es más, en los últimos años han sido más las veces que he entrado al estadio con un carné prestado de las que me he retratado en taquilla.
Por eso, habrá quien discuta mi cadismo. Me la suda, como no podía ser menos. Si siento algo por mi Cádiz es cosa mía. De hecho, hasta ahora no le he dedicado ninguna entrada a mi club, y si ahora lo hago es porque... porque me da la gana ¿o es que tengo que dar explicaciones? Vaya, hoy me he levantado gadita gadita.
El Cádiz es mi equipo desde el instituto, que yo recuerde. Antes no me interesaba la liga en absoluto. Y no es que a partir de entonces me interesara mucho, sino que todo cristo era del Madrid o del Barcelona, así que yo, por joder, me hice del Cádiz. Por aquel entonces el equipo estaba basculando entre Primera y Segunda división. Eran los años de Mágico, de Irigoyen, de las permanencias épicas o conseguidas de chiripa en los despachos. Me podría haber hecho del Valladolid, ya puestos, pero me venía mal por si algún día me daba por ir a un partido. A pesar de la cercanía, en mi pueblo los cadistas éramos minoría. Casi todos los que había eran gaditanos emigrados por falta de vivienda en la capital.
Ser de un equipo modesto tiene muchas ventajas para el que pasa de los resultados ligueros. Con saber cómo ha quedado mi equipo me basta. Además, quedo fuera de toda disputa entre madridistas y barcelonistas. Con decir que soy del Cádiz ya nadie me molesta. Pobrecito, pensarán. Encima es un club que suele caer bien a la gente.
Mi relación con el club ha sido de lo más satisfactoria. Sus derrotas no me han afectado demasiado, al tiempo que me ha dado algunas alegrías con sus victorias. La ventaja del que esta acostumbrado a perder, supongo ¿Que el club desciende a Segunda? No problema, ya volveremos. ¿Que nos vamos al infierno de Segunda B? En fin, qué se le va a hacer, así habrá más sitio en el Fondo Norte. De hecho, la temporada que mejor me lo he pasado en el Carranza fue la última en Segunda B, y el momento más emocionante, el partido contra el Tenerife que significó el ascenso a Segunda. Miles de cadistas en un campo sin jugadores (se jugaba en Tenerife), viendo el partido en una pantalla gigante instalada al efecto. Al final, euforia, invasión al campo, amigos perdidos, móviles inservibles por colapso de red...
No es que quiera que el Cádiz no esté en Primera, y desde luego, ojalá nunca vuelva a caer en ese pozo negro que es la 2ªB. Pero como que me sentía menos identificado con el club este año. Tanta gente que antes era de un grande y ahora resultaba que era de un grande y del Cádiz. Por mí bienvenidos, pero con tanta gente se pierde la gracia de pertenecer a una minoría. Entradas a precio de oro, cuando no imposibles de conseguir. Camisetas a 60 leuros. Qué le voy a hacer, si me cae mejor un Cádiz modesto, un club cuyo único activo es la afición. Una afición, en general pacífica y pasota, compuesta por personas de muchos puntos de la provincia y fuera de ella, a la que “me suda donde el equipo juegue, porque mi Cádiz, mi Cádiz es el mejor”, como dice uno de sus muchos cánticos. Que acuda al campo tanto para ver un partido contra el Valencia que contra el Jerez de los Caballeros.
A mí al menos me da lo mismo. Quizás porque en el Carranza, el mejor espectáculo no está en el terreno de juego. Así que no sé si más que nunca, pero sí más que el año pasado, estaré con mi Cádiz. Aunque no me haga socio.

domingo, 2 de julio de 2006

Exvotos

El otro día asistí a la boda de unos amigos en Alcalá de los Gazules. La ceremonia se celebró en la Ermita-Santuario de la Virgen de los Santos, situada a unos 5 kilómetros del pueblo. Tiene fácil acceso desde la autovía Jerez-Los Barrios, entre las salidas de Medina y Alcalá.

Yo no la conocía, y la verdad es que merece la pena la visita. Hice unas cuantas fotos de la capilla de la ermita, que creo os pueden interesar. Sobre todo me gustaron los exvotos que rellenan las paredes. Al parecer, constituyen la mayor colección de Andalucía.
Me explico: los exvotos son cuadros que representan un favor concedido a un creyente por parte de un santo, una virgen, etc. Normalmente van acompañado de un texto concretando las circunstancias del milagro, aunque los dibujos son de por sí bastante explicativos. Ya se sabe, antes sólo sabían leer los curas…


Me entretuve casi todo el tiempo de la ceremonia en curiosear los exvotos que me cayeron cerca, y la verdad es que pasé un rato divertido. Los hay modernos, como uno de los años 80 en que una familia agradece a la virgen que su hijo no muriese atropellado por un coche. Y también bastante antiguos (s. XVIII), en los que el coche es sustituido por un toro o un caballo. Los más repetidos son los del agraciado en una cama, y algún familiar rezándole a la virgen para su curación. La calidad de la ejecución es también muy dispar.
Fotografié algunos representativos. Espero que os gusten.


"31 Julio 1934. Teresa Toscano Pérez, salvada gracias a la Virgen de los Santos, por D. Alfonso Marchante Romero y D. Eladio Garzón Rodríguez."


"Juan José Toledo Reyes, 16 de mayo de 1980"


"Hallándose Josefa Viglaria de la Cuesta de 9 años de edad gravemente enferma, se encomendaron sus padres a Nª Sª de los Santos, y alcanzaron su salud."