Hacía ya algún tiempo que no dibujaba una caricatura. En esta ocasión la homenajeada es mi madrina, y la excusa, hacerle un regalo por reyes que fuera diferente.
Decir que le ha encantado; hasta se la ha puesto de foto de perfil en sus redes sociales.
Para el abrigo tomé como referencia una imagen de Cruela de Vil, aunque mi madrina es todo lo contrario al personaje. Le encantan los animales. De hecho la he dibujado con su perrita (ya fallecida) y su gorrión.
La próxima serie de caricaturas la dedicaré a mis compis del tenis. ¡Volveré!
En efecto, no conseguí acabar el libro de bocetos, aunque no me he quedado lejos del objetivo.
Aquí os traigo los últimos que he perpetrado, todos en acuarela con algún toque de guache al final.
Este boceto de una calle de Montmartre me gustaría haberlo dibujado in situ, pero no pudo ser. La foto la tomé en nuestro viaje a París del pasado octubre (del cual por cierto no os he hablado).
Estando de vacaciones hicimos la ruta de la Punta del Boquerón, en San Fernando. Es una rutita corta, de solo hora y media ida y vuelta, pero muy recomendable. Dibujo in situ y color en casa.
El fin de semana pasado nos pasamos por Los Barreros para dibujar un rato. Es un curioso paraje de Puerto Real que ha conocido mejores tiempos. Antigua cantera de barro para hacer ladrillos, en él es fácil encontrar cristales de yeso. Era frecuente lugar de paseo con mi padre y nuestros perros cuando yo era pequeño, así que le tengo cariño.
