jueves, 9 de noviembre de 2006

Cannabis sativa

Una historia verídica, como diría Paco Gandía. Es real y le sucedió hace años a un amigo por aquel entonces cercano.
Este chaval iba de camino a la universidad con unos colegas. Salieron de la estación de autobuses de Cádiz, y al pasar por la plaza de España se les acercó un porreta pidiendo papel. Según algunos, hasta hizo el universal gesto de llevarse dos dedos a los labios.
Sea como fuere, mi amigo no se fijó en gesto ni en el contexto. Todos dijeron que no, menos él que contestó que por supuesto. Sacó su carpeta, eligió el compartimiento adecuado y le alargó un folio al individuo en cuestión. Éste se quedó mirando el folio, luego al chaval, luego al folio, supongo que decidiendo si le estaba tomando el pelo o es que tenía una caraja descomunal.
Debió decidir esto último, porque se dio media vuelta sin mediar palabra, y se alejó moviendo la cabeza de un lado a otro y pensando (esto es solo una suposición) que para que luego digan que los porros te dejan tonto.

24 comentarios:

  1. q buena la historia basada en hechos reales,to un arte si señor

    ResponderEliminar
  2. Veo que guardas todo tipo de recuerdos Malatesta, tu cajón desastre debe ser tremendo...
    Ey, los porros todavía no han dejado tonto a nadie, que se sepa...

    Un beso.

    ResponderEliminar
  3. Ey! A mi me pasó algo parecido a lo de tu amigo. Pasa que a mi me pedían papel en la biblioteca de la Uni. Así que creo que tengo excusa.

    ResponderEliminar
  4. Que no han dejado tonto a nadie? en mi clase hay una que ha perdido el norte, tiene enfermedades patologicas, y tiene regresiones a su infancia.
    Euros euros dubidu si tu los pruebas aLLÁ TÚ. (BUFF QUE MALO...)

    ResponderEliminar
  5. a mi una vez me pidieron "un sigarrito pa jaserme un porro, niña"... no hacía falta explicaciones k yo le daba el cigarro igual... ay, ese Cádi..

    ResponderEliminar
  6. Pues sí, y aún guardo más, miada.
    Una vez, por el barrio de la Viña de ese Cádi que añora valiada, un drogata me pidió un cacho de papel de aluminio del bocata que me estaba comiendo. Tampoco hacía falta que me dijera para qué lo quería...

    ResponderEliminar
  7. Estooooo.. y digo yo, si Lunaria me hizo llegar las semillas de ídem (qué te voy a contar, no?), no podrías tú... Es por rellenar un par de macetas que tengo vacías, sabes?

    ResponderEliminar
  8. Muy interesante tu blog es diferente

    ResponderEliminar
  9. Pues la dichosa macetita que estaba en el balcón creció bastante, y al final acabo la pobre sequita después de todos los cuidados que le dí :)

    ResponderEliminar
  10. Jajaja, bonita anécdota y bonita hoja. Muchas gracias.

    Lunaria, lamento la pérdida ;) Doña María, a veces, es complicada.

    ResponderEliminar
  11. Me gusta esa hoja de...te' verde! con poder antioxidante...jajajaja!
    Yo guardo unas semillas de antaño.. vintage...como los fantasmas que saldrian de ellas...
    ;-))
    Tu baul me gusta...

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  12. me alegra que te haya gustado mi blog...cuando quieras visítame y yo lo haré adiario. Yo también tengo acento cuando hablo...

    ResponderEliminar
  13. Sin dejar tonto a nadie,en los grandes consumidores como algun compañero de piso que he tenido si ppuede llegar a un sindrome como de ambivalencia psicoafectiva,que creo que incluso hay estudios al respecto...
    Posi la historia es veridica...

    ResponderEliminar
  14. Jajajajajaj, tu amigo tiene toda la pinta de parecerse a mí. Que soy muy despistá.

    Una anécdota muy buena. Yo debería apuntar a veces cosillas de éstas graciosas que suceden en el día a día, porque se me olvida todo chico. Menos mal que queda gente como tú.

    Un besazo!

    ResponderEliminar
  15. Un dato para los rastreadores de noticias curiosas por si se quieren entretener en buscarlo.
    Hace muy pocos años, se publicó que en una casa cuartel de la guardia civil junto a una carretera y en la cuneta de la misma habia un frondoso y hermoso vergel de la susodicha. Era un pueblecito del Sur de la provincia de Cuenca.
    Eso solo era la noticia, se ignora quién plantó aquello y si alguien sabia lo que era....

    ResponderEliminar
  16. Divertida historia, malatesta. Puede que a mí me hubiera pasado lo mismo. Saludos cordiales.

    ResponderEliminar
  17. Muy buena historia... y que le digan que eso no es papel... lo raro es que no se llevara un galleto.
    Veo que eres de guardar cosas... a mi ya me amenazan son hacer una hoguera con mis cosas, uifff...
    Besos.

    ResponderEliminar
  18. yo conozco a unos dinosaurios que están todos re pegaos y ya me empiezan a aburrir.

    ResponderEliminar
  19. Me hace mucha gracia esta historia. Aquí, dentro de todo sigue siendo un vicio oculto que nadie ve y muy poco se huele. Creo que al más pintado le da un infarto si le pidieran papel, del que sea.

    ResponderEliminar
  20. Unos amigos en el fondo sur del ramón de carranza. ¿Quienes serían los afortunados?
    También me encanta jugar con lo prohibido, ya he colgao el inedito.

    ResponderEliminar
  21. Hola estoy buscando alguien k me venda unos chivatos buenos aqui os dejo mi msn a

    ResponderEliminar
  22. alexandro93-@hotmail.com

    ResponderEliminar