Hostal La Guarida II

La buena fama del Hostal La Guarida ha llegado a oídos de toda la comunidad gorrionil de mi zona. Y si no, a los hechos me remito.

Este año los índices de ocupación del hostal se estaban manteniendo, a pesar de la crisis. La semana pasada me encontré dos posibles huéspedes en mi calle, así que los capté para que no los pisara un coche o se los comiera un gato y los instalé en el Hostal. Uno de ellos hace dos o tres días que hizo el check out, mientras que su hermano, al que hemos venido en llamar "el mijita" sigue disfrutando de su estancia. No creo que tarde mucho en irse, porque ya me cuesta tela trincarlo para darle su ración de pan mojado en agua.

Pero a lo que iba. Ayer por la tarde, mientras descansaba antes de volver a la feria, al pasar por la entrada escuché un gorrión piar bien fuerte tras la puerta. Abro, y me encuentro la siguiente escena, que parece de película de Disney:

Vamos, que ya no me hace falta andar con técnicas de marketing agresivas y "secuestrar" a mis clientes, o esperar a que caigan del limonero de la vecina, ¡llaman directamente a la puerta del Hostal!

Cuando me recobré de la sorpresa y paré de reir, fui rápido a por el móvil para hacerle la foto. Se dejó coger tranquilamente, sin mover un alita, y ha pasado con nosotros un día completo. Hoy se ha marchado, muy satisfecho del servicio recibido.

Espero que el pico a pico funcione y el negocio siga viento en popa.